Los emprendedores crearon un SaaS que centraliza y lleva la trazabilidad de las importaciones, con el que levantaron US$ 1,5 millones el año pasado. En los próximos meses buscan aterrizar en México, Perú y Colombia.

En 2015 el entonces estudiante universitario Martín Díaz decidió seguir la tradición de su familia y emprender, esta vez incursionando en una industria diferente a la de sus antepasados: los creadores de la marca de cerámica Lozapenco, historia familiar que curiosamente lo une al jugador de fútbol nacional Ben Brereton Díaz, quien es su primo lejano. Dejando así la loza y el fútbol a sus familiares, Díaz escogió su propio camino: el emprendimiento tecnológico, que lo llevó a fundar Shippter. «Somos emprendedores en distintos rubros, cerámica, fútbol y tecnología», afirma el emprendedor.

Su historia, cuenta Díaz, tuvo su génesis cuando decidió importar sillas desde China y se topó con un dolor de cabeza, los trámites de la logística: «Yo creí que era como importar por Amazon, había muchos promovedores de servicios, como las navieras, seguros y aduanas. Muchos actores que hay que conectar y contratar para hacer importaciones de grandes volúmenes, una vez que yo tomé todos los servicios estuve cerca de dos meses persiguiendo la información de lo proveedores todo vía mail». A partir de esto, Díaz se propuso investigar si el problema era algo repetitivo y así era, «había más de 14 mil empresas de segmento pyme, en las que los mismos dueños que tienen que gestionar las importaciones».

Así, el emprendedor decidió desarrollar una «aspirina» para el problema: una plataforma que centraliza la gestión de diversos servicios de cargas que se exportan o importan e integra y automatiza todos los procesos de la cadena de logística internacional, logrando que pymes y empresas de mayor tamaño tengan trazabilidad completa de sus importaciones.

«La plataforma permite que se puedan tomar los servicios de punta a punta, como los camiones en origen, flota internacional, etc. Se puede cotizar, reservar y en línea, sin hacer ninguna gestión, nosotros le decimos al cliente qué pasa en cada parte de la operación. Trabajamos con distintas navieras y hacemos la reserva, también con agencias de aduanas, compañías de seguros, para articular todos los servicios en la plataforma», comenta Díaz. De esta forma, tras encontrar un proveedor, la pyme ingresa a Shippter y detalla el pedido, y elige una naviera para realizar el transporte.

Actualmente la startup tiene cerca de 350 cliente, principalmente pymes, número que buscan triplicar este año. En cuanto a facturación cerraron 2201 con US$ 4 millones, dice Díaz, lo que buscan cuadriplicar en este ejercicio.

Expansión y nuevo producto

Díaz cuenta que 2022 será el año en que la startup iniciará su escalamiento internacional y que tiene a Perú, México y Colombia en la mira, «estimo que en abril deberíamos ya deberíamos en alguno de estos tres».

Junto a esto, busca levantar una ronda de inversión por cerca de US$ 7 millones -en 2021 captaron U$ 1,5 millones con Invexor– y la que proyecta abrir en abril, por lo cual ya está en conversaciones con fondos. El capital, dice, irá en parte destinado a explotar un nuevo modelo de negocio, en el que comercializarán su solución como un SaaS y con el que apuntan a grandes empresas, para que éstas puedan coordinar directamente con los actores vinculados a sus importaciones. «Nos dimos cuenta que el Software interno que desarrollamos y usamos para a articular nuestra plataforma es muy útil para ellos, que pueda gestionar todos los servicios que necesitan tomar», señala el emprendedor.

Hoy el nuevo producto está en fase piloto con tres empresas y buscan comenzar a ofrecerlo a nivel general en marzo próximo.