- Qomplement, una startup mexicana, presenta una inteligencia artificial que funciona directamente en la computadora del usuario, sin depender de la nube.
En medio del furor global por GPT-5 y los debates encendidos sobre privacidad y dependencia de la nube, una startup latinoamericana está apostando por una vía muy distinta. Se trata de Qomplement, creada por dos ingenieros mexicanos, que ha desarrollado una inteligencia artificial que no necesita servidores externos: funciona directamente en la computadora del usuario.
Esta propuesta se desmarca de soluciones como BrowserUse, Comet de Perplexity y el propio GPT-5, que requieren conectividad constante con la nube para operar. En cambio, la tecnología de Qomplement actúa dentro de cualquier software que una empresa ya use, incluso si es antiguo o no fue diseñado originalmente para trabajar con IA. ¿El resultado? Menores costos, mayor seguridad y cero necesidad de reemplazar sistemas existentes.
IA que se adapta al usuario, no al revés
Qomplement convierte cualquier computadora en un asistente inteligente capaz de ejecutar tareas repetitivas: desde abrir archivos y organizar información, hasta generar reportes o interactuar con plataformas internas. Todo se realiza sin errores, sin necesidad de intervención humana constante y, lo más importante, sin salir del entorno habitual de trabajo.
La magia detrás de esta herramienta se llama CUA (Computer Using Agent), un modelo que se comporta como un usuario más, pero con la eficiencia de una máquina. A diferencia de los grandes modelos desarrollados por gigantes como OpenAI o Anthropic —que pueden costar hasta tres dólares por interacción—, la IA de Qomplement opera a una fracción mínima del costo, sin sacrificar precisión ni velocidad.
La privacidad es clave
La propuesta ha comenzado a tomar fuerza especialmente en sectores altamente regulados como el transporte, la salud y los servicios financieros. “En estos rubros, cambiar sistemas o subir datos a la nube puede ser inviable. Nuestra tecnología permite automatizar sin alterar el flujo actual de trabajo”, explicó Kerim Taray, cofundador y CEO de Qomplement.
Un ejemplo claro ocurrió en una empresa de transporte, que enfrentó una crisis operativa cuando una nueva regulación fiscal la obligó a emitir más de 10,000 facturas al mes. El equipo no daba abasto, aumentaron los errores y la operación se detuvo. Al implementar la herramienta de Qomplement, automatizaron el proceso sin modificar sus sistemas, lo que se tradujo en un ahorro mensual de 15 mil dólares.
Modelo híbrido: lo mejor de ambos mundos
A diferencia de otras soluciones que operan exclusivamente en la nube, Qomplement propone un modelo híbrido. La IA se ejecuta localmente, pero puede conectarse a la nube solo cuando es necesario, gracias a una alianza estratégica con Amazon Web Services. Esto permite aprovechar infraestructura de alto rendimiento sin comprometer la seguridad de los datos ni aumentar costos para el cliente.
“Creemos que la forma de trabajar necesita evolucionar. La inteligencia artificial no va a sustituir al humano, sino a complementarlo. Nuestra herramienta actúa sobre cualquier sistema, directamente desde la computadora, sin exigir cambios”, enfatiza Taray. “Ayuda a que las personas se concentren en lo que realmente importa, mientras mantienen el control total de su información”.
Del corporativo a la pyme: IA para todos
Aunque los primeros usuarios han sido grandes corporativos, los fundadores de Qomplement ya están desarrollando una versión orientada a pequeñas y medianas empresas, donde los procesos manuales siguen siendo la norma y el control de datos es crucial. Su misión es clara: democratizar la inteligencia artificial, hacerla accesible y útil para cualquier organización, sin importar su tamaño o presupuesto.
Respaldada por fondos de inversión de San Francisco y América Latina en una ronda pre-semilla, la startup busca posicionarse como una alternativa competitiva frente a gigantes tecnológicos, con una solución que respeta la infraestructura existente, protege la privacidad y baja las barreras de entrada a la automatización inteligente.