- La fintech chilena concretó una ronda por US$ 40 millones para su crecimiento en México y Colombia y el aterrizaje en Brasil.
- El financiamiento fue liderado por Nazca y contó con participación de Auteco, WIND Ventures, Güil Mobility Ventures, Dalus Capital, Kayyak Ventures, Fynsa, Buena Vista Capital y Amarena VC.
- Este año la startup adquirió a la colombiana CrediOrbe del grupo Auteco.
La fintech Galgo, fundada en 2019 bajo el nombre de Migrante para ofrecer financiamiento a extranjeros que llegaban a Chile, ha vivido importantes hitos para el desarrollo de su servicio en Latinoamérica. La startup fundada por Sebastián Ayub, Diego Fleischmann, Ignacio Canals y Benjamín Izikson, acaba de concretar una ronda por US$40 millones.
Tras seis meses de haber adquirido la colombiana CrediOrbe del grupo Auteco y donde además cambió su nombre a Galgo, la fintech chilena concretó un nuevo hito con este levantamiento, liderado por Nazca y con participación de Auteco, WIND Ventures, Güil Mobility Ventures, Dalus Capital, Kayyak Ventures, Fynsa, Buena Vista Capital y Amarena VC.
A la fecha, Galgo opera en Chile, Perú, Colombia y México, con estos dos últimos como sus principales mercados, señala Fleischmann. «Desde la adquisición de CrediOrbe hemos andado súper bien, de hecho, una de las noticias entretenidas es justamente nuestro desarrollo en territorio colombiano y mexicano«, asegura el cofundador, quien añade que el capital está fundamentalmente destinado al crecimiento en dichos países.
Más crecimiento y Brasil en el horizonte
Fleischmann comenta que la startup ya abarca prácticamente la superficie completa de sus mercados actuales y en ese sentido indica que «la expansión es bien porosa». «Nuestra meta de acá a junio de 2024 es duplicar el nivel de ventas que tenemos. Hoy financiamos cerca de 3.000 motos al mes, lo mismo que el mercado de ventas de motos en Chile», explica el CEO.
Por otro lado, el emprendedor indica que dentro de su foco expansivo está el plan de aterrizar en un nuevo país y la mirada está puesta en Brasil, donde ya se encuentran explorando la estrategia de trabajo. «Nuestro modelo de negocio lo podemos replicar muy bien en cada país al que ingresamos. Pero dentro de los desafíos es que debemos tener cuidado con el riesgo de crédito, tenemos que ser selectivos en nuestros clientes», afirma Fleischmann.