Tras una década siendo parte de Endeavor, primero como mentor y después integrando el portafolio de emprendedores, Eduardo Wallach, cofounder de Kura Biotech se consagró como el flamante “Emprendedor del año 2022” por Endeavor Chile, en una ceremonia a bordo del crucero Stella Australis navegando por la patagonia chilena que además celebró los 25 años de la organización.

“Hoy el propósito de Endeavor es multiplicar más que escalar y este premio trata de reconocer el impacto que los emprendedores logran tener sobre el ecosistema, a través de mentorías, charlas, evaluación de posibles nuevos candidatos, etc. Me siento muy honrado”, asegura.

Manuel Rozas (actual CSO), fundó Kura Biotech en Puerto Varas -Región de los Lagos- en 2013, cinco años después (2018), Wallach se une a la biotech como CEO y socio. La startup se enfoca en la producción de reactivos enzimáticos para la detección de drogas, transformando desechos de industrias marinas en insumos.

«Somos el mayor productor mundial de reactivos enzimáticos para detectar drogas, tenemos clientes como Quest Diagnostics –el mayor laboratorio del mundo– e incluso somos proveedores del FBI. Hace cuatro años comenzamos un camino de diversificación para entrar a nuevas industrias, para tener más alcance y escala. Decidimos enfocarnos en dos espacios, uno para el testeo y otro para la genómica«, cuenta Wallach.

El emprendedor detalla que a partir de estos últimos desarrollos, crearon la marca Avenire, donde formulan kits de detección de COVID-PCR. También para patógenos en alimentos, como Listeria, y ahora están con Salmonella. Además, tienen Blikka, marca con la cual desarrollan enzimas que se aplican en distintos lugares de la genómica aplicada a la medicina de precisión, y están lanzando productos para la lectura del genoma y productos que se van a usar en la escritura de DNA. «Nosotros llevamos la ciencia al mercado y esa combinación es la clave para atraer talento«, dice el emprendedor.

¿El premio cambia la perspectiva?

-No sé si genera un cambio en mis expectativas, quizás en la convicción de que vale la pena dedicar tiempo más allá del día a día y de los desafíos que uno tiene como emprendedor y founder. Porque al final estamos para algo un poco más grande y es bonito saber que ese tiempo invertido se reconoce y tiene impacto en otras personas. 

-¿Cuál es tu balance del ecosistema emprendedor chileno?

–Está en su mejor momento porque está creciendo, esto se produce por el grado de madurez que ha alcanzado. Hace algún tiempo el ecosistema emprendedor chileno, si bien tenía mucho talento, todo era muy local y poca ambición de escalar (…) Siguiendo algunas empresas grandes, los emprendedores empezaron a sentirse más latinoamericanos y eso viene con una mirada de pensar más en grande.

Durante los últimos cinco años se desarrolló mucho el venture capital y las otras áreas del financiamiento de startups, por lo que te diría que todo eso se está consolidando con una diversificación de la matriz. Hasta hace poco tiempo el emprendimiento en Chile se concentraba en un par de verticales, mucho retail, minería y un par de cosas. Ahora, todo es más transversal, con softwares, Inteligencia Artificial e incluso nosotros como Kura, que somos una biotech, de hecho, algo muy positivo es la reacción que ha tenido el ecosistema local a las restricciones del capital.

-Kura Biotech es de región, ¿cómo evalúas aquel ecosistema? 

-El concepto «ser de región» a nosotros nos puede poner en un lugar equivocado. Si bien, tenemos nuestros headquarters ubicados en Puerto Varas, no tenemos clientes en el país, por lo tanto esa parte de ser un emprendedor de región no la vivimos tanto. Aunque, estamos ubicados fuera de Santiago y es un balance súper positivo, ya que enfrentamos algunos desafíos que emprendedores de la capital no lo viven, pero también es una ventaja.

Por ejemplo, tenemos acceso al talento, que si bien hay talento que es más difícil de conseguir, de repente hay algunos que se consiguen rápidamente porque le interesa vivir en un lugar como Puerto Varas. Pero, uno de nuestros compromisos principales es: “Limitless Spirit”, es decir que miramos las cosas desde las oportunidades, no desde las limitaciones. Le sacamos el máximo provecho a las ventajas. 

¿Qué se viene para Kura Biotech?

-En el caso de detección de patógenos nuestra expectativa es entrar formalmente al mercado antes de fin de año. En los próximos meses vamos a recibir la certificación internacional y con eso nuestro test será igual de válido que todos los tradicionales. Tenemos un pipeline de clientes en Chile que están esperando la certificación para empezar a usarlo y el primer paso es entrar formalmente a un país de Latinoamérica. Nuestra idea es de acá a 12 meses estar activamente en territorio nacional y un país grande más, el que atractivamente podría ser México.