Leasein, fundada en 2017 por Carlo Mario Dioses, es una empresa especializada en la gestión de activos tecnológicos. Su objetivo es ofrecer soluciones sostenibles para dispositivos electrónicos en desuso, promoviendo la economía circular y reduciendo el impacto ambiental.

Actualmente, enfrenta el desafío de gestionar las laptops adquiridas en la pandemia, que están llegando al final de su vida útil. «Ya comenzamos a gestionar el activo residual para darles un tratamiento responsable, sostenible y que no vaya a un desperdicio», comenta Dioses. Cuentan con la infraestructura, el conocimiento y el financiamiento para abordar este reto.

Hacia un modelo sostenible

Leasein, busca obtener la certificación B Corp, alineándose con un modelo de triple impacto: social, ambiental y económico. «Esperamos que hacia el tercer o cuarto trimestre completamos esta certificación y podamos combinar sostenibilidad con nuestra solución», explica Dioses.

Parte de su estrategia es la creación de un mercado secundario formal. Esto permitirá reutilizar o reciclar laptops, reduciendo el desperdicio y promoviendo un ecosistema colaborativo. Empresas, bancos y organizaciones de reciclaje trabajan en conjunto para dar una segunda vida a estos activos.

La bancarización y el capitalismo consciente

La bancarización de las operaciones es clave para asegurar la transparencia en la gestión de residuos tecnológicos. «Todas las operaciones que hacemos son a través de los bancos para fortalecer el sistema financiero formal», señala Dioses. Esto facilita el acceso a financiamiento y fomenta la formalización del sector tecnológico en América Latina.

Leasein también ha establecido alianzas con empresas de reciclaje como Revo para garantizar un tratamiento adecuado de los residuos tecnológicos. Además, se alinea con el movimiento de capitalismo consciente, promoviendo prácticas empresariales responsables. «Participamos en un programa para líderes que buscan generar impacto positivo a través de las empresas», destaca Dioses.

Con estas acciones, Leasein demuestra que es posible unir rentabilidad y responsabilidad social. Su modelo de negocio sostenible impulsa un cambio en la gestión de activos tecnológicos, fomentando la colaboración y la innovación en el sector.