La biotech chilena ByBug, pionera en Latinoamérica en la biomanufactura utilizando insectos, acaba de anunciar el cierre de su ronda seed por US$ 1,4 millones. Esta reciente inversión estuvo a cargo de los fondos Südlich Capital y Arpegio de Chile, GRIDX de Argentina, Halcyon Venture Partners y Atento Capital de Estados Unidos. 

Fundada por José Del Solar (CEO), Daniel Troncoso, Rocío Espinosa y Gerardo Bluske, la biotech desarrolló un innovador método de biomanufactura llamado ByBug Synthetics. Desde la startup chilena explican que este sistema utiliza insectos e ingeniería genética para transformar subproductos agrícolas en proteínas recombinantes. Un ejemplo de aquello, son los anticuerpos e inmunoestimulantes para la industria animal, factores de crecimiento, entre otros. «Estos avances han sido fundamentales para ganar la confianza y el respaldo de un grupo sólido de inversores», indican.

ByBug va por su escalamiento local e internacional 

En ese sentido, del Solar destaca que la reciente inversión marca un hito importante para ByBug. «Nos permitirá no solo expandir nuestro centro de I+D en Coquimbo, sino también iniciar operaciones comerciales en Tulsa, Oklahoma marcando un paso significativo en nuestro camino a la internacionalización. Esta nueva base en EE.UU. fortalecerá nuestra capacidad para servir a nuestros clientes clave en América del Norte», señala el CEO.

Por otro lado, desde ByBug también usarán el capital para continuar la optimización de la tecnología de edición genética y escalar la producción de proteínas recombinantes. Comentan que tienen el potencial de revolucionar la farmacéutica tanto animal como, eventualmente, humana al reducir los costos de producción utilizando como materia prima subproductos agroalimentarios limpios. Además, se destinarán recursos para reforzar la propiedad intelectual de la empresa y establecer las operaciones en Tulsa, un lugar estratégico que servirá centro comercial clave.

«El desarrollo de una plataforma para la producción de proteínas recombinantes en insectos es una apuesta gigantesca. En este equipo, vimos las capacidades y la ambición necesarias para enfrentar un desafío de tal magnitud. No es solo una solución para la gestión de residuos, sino que trabaja en la vanguardia del conocimiento con la edición genética de las moscas soldado negro«, explicó Matías Peire, CEO de GRIDX.

Planes para su crecimiento en EE.UU

Desde la biotech indican que su desarrollo en el mercado estadounidense ha sido prometedor. Hoy, ya han firmado acuerdos preliminares con dos de los principales criadores de insectos del mundo. Justamente, estos acuerdos son en ciudades cercanas a Tulsa, Oklahoma. «Es un área ideal debido a la disponibilidad de residuos agroindustriales», destaca Bluske.

El cofundador comenta que están realizando validaciones preliminares en Latinoamérica y planean replicar estos pilotos en Estados Unidos. «A mediano plazo, nuestro objetivo es establecer una infraestructura que permita producir y suministrar cepas de mosca soldado negro genéticamente editadas directamente desde EE.UU«, señala.

«A través de estos ensayos, queremos demostrar que nuestra tecnología, además de ser mucho más sustentable, es más eficiente en términos de costo y logra un producto de una calidad igual o superior a los métodos actuales de producción que se basan en fermentación de precisión», añade Bluske.

Por otro lado, ByBug también trabaja en el diseño de su proceso de downstream. El emprendedor explica que se trata de «ser capaces de purificar las proteínas producidas, extrayéndolas de la biomasa del insecto para obtenerlas en estado puro e incrementar las alternativas de dosificación y uso». Añade que esta unidad de negocios aún está en etapa pre-revenue, por lo que pretenden terminar el 2024 con ventas asociadas a pilotos comerciales pagados.