Talento y acceso a capital, son algunas de las principales brechas para la vertical biotecnológica que las startups mencionan.

Esta realidad no ha sido desconocida por Latinoamérica que ha fortalecido el desarrollo de este tipo de startups, por lo que han comenzado a salir incluso VCs especializados en este tipo de empresas. ¿Cuáles son sus principales desafíos para 2023?

Durante los últimos tres años se ha visto un aumento significativo en las inversiones de capital de riesgo en la industria biotecnológica. De acuerdo con cifras de Mckinsey, entre los años 2019 y 2021, los fondos de venture capital invirtieron más de US$ 52 mil millones en startups biotech de base terapéutica en todo el mundo. Dos tercios de eso se destinaron a nuevas empresas con tecnologías de plataforma.

LifeFactors

Santiago Jaramillo, CEO de la biotech colombiana LifeFactors, señala que la industria biotech y en especial las startups con soluciones en salud, «tiene la misión de continuar desarrollando tecnologías en salud más eficaces para atender retos actuales como las enfermedades de orden oncológico, inmunológico, neurológico, metabólico, etc”.

LifeFactors nació en 2017 y está inmersa en uno de los sectores farmacéuticos más relevantes: el de los medicamentos derivados de plasma (PDMP). Este es un mercado que, para el 2021, representaba un valor total estimado de US$ 40,5 mil millones, pero que proyecta alcanzar un valor de US$ 81 mil millones para el 2030.

Esta startup está desarrollando una plataforma totalmente integrada que involucra tanto al donante como al paciente, dando acceso, mediante tecnologías propias, a medicamentos hemoderivados y otros biológicos de alto costo. Además, tienen un sistema de conversión del plasma en materia prima farmacéutica.

Para Jaramillo, más allá del levantamiento de capital, dentro de este tipo de empresas se presentan otros retos como «la formación del talento con competencias en la industria biofarma, proyectos colaborativos de investigación y desarrollo». Sin embargo, también evidencia que estas startups tienen el desafío de «ayudar en el posicionamiento de Colombia y la región, como un lugar atractivo para las inversiones de esta naturaleza».

Bio Natural Solutions

Por otro lado, Miguel Malnati, CEO de la startup peruana Bio Natural Solutions (BNS), que desarrolla compuestos y conservantes que alargan la vida de las frutas a partir de residuos de la agroindustria, segura que el panorama de las biotech “es muy alentador. Junto con las foodtech y healtech este sector es de los que más proyección tienen. De esta industria, que se basa en procesos biológicos, se pueden desprenden nuevos procesos y eso va a marcar el futuro”.

Para Malnati, el mayor reto “es el acceso a capital, porque es necesario implementar tecnologías especiales, montar un laboratorio acreditado, patentar procesos, entre otras cosas. Entonces  tener un prototipo funcional y captar la atención de los stakeholders para levantar fondos”.

“Además, actualmente muchos procesos de la industria biotech no tienen regulaciones claras, entonces es necesario tener un equipo legal para lograr acreditaciones”, puntualiza el founder de BNS, que actualmente tiene 32 clientes en Perú y más de 10 en Colombia, Honduras y México.