Las startups en Bolivia no solo han crecido durante el último año, sino que también han dado pasos decisivos hacia su internacionalización. El Mapeo TIC 2024, elaborado por Funda-Pró, Fundación Solydes, Fundación Emprender Futuro, BIM , ICCO y la Universidad Católica Boliviana, arroja luz sobre los avances y desafíos del ecosistema tecnológico en el país. Este informe, con sede en La Paz, ofrece una radiografía del panorama actual y las oportunidades del ecosistema digital.

El mapeo destacó que el número de startups en el país pasó de 147 a 167 en un año, con un 93% concentrado en las ciudades de Santa Cruz, Cochabamba y La Paz. Esto confirma que el eje troncal sigue siendo el principal motor del emprendimiento tecnológico en Bolivia.

Allison Silva, Directora de Fundación Emprender Futuro, subraya la importancia del Mapeo TIC para el crecimiento del ecosistema. «Es una iniciativa que nace hace seis años con la misión de generar un documento que nos permita definir las mejores acciones en el ecosistema digital. No puedes mejorar lo que no puedes medir», asegura. Junto con eso, Silva resalta que el informe permite analizar la evolución de los actores y tomar decisiones estratégicas para impulsar el crecimiento.

La participación de las startups en los diferentes sectores de la industria muestra que aproximadamente la mitad se encuentra en tres sectores, siendo los más relevantes fintech, edtech, y e-commerce y marketplaces. El primero representa la mayor cantidad con un 32% de las startups a nivel local.

El Mapeo TIC permite descubrir los desafíos y oportunidades

Además de identificar el aumento de startups, el informe pone de relieve la expansión internacional de empresas bolivianas hacia países como Paraguay, Perú, México y Chile. Frente a esta tónica, Silca explica que «Paraguay ha presentado muy buenas condiciones para invertir y escalar operaciones. Lo mismo ocurre con Perú, donde se ha visto un interés creciente de las startups bolivianas por establecerse de manera formal».

Aunque el ecosistema ha madurado en ciertos aspectos, para Silva los desafíos persisten, especialmente en temas de financiamiento y la atracción de talento. Silva comenta que conectar a startups con inversores será clave para continuar escalando a nivel internacional, mientras que atraer y retener talento en el país sigue siendo un reto.

Por su parte, Rolando Sahonero, Director de Programas en Funda-Pró, señala que el ecosistema boliviano aún es incipiente en algunas áreas, pero destaca los esfuerzos por mapear startups que integran las relaciones urbano-rurales. «Esto añade una nueva dimensión de valor al mapeo, permitiendo visibilizar startups que, aunque pequeñas, tienen un gran potencial de crecimiento«, asegura.

Sumado a eso, Sahonero también menciona la importancia de integrarse con ecosistemas más maduros de la región para potenciar el crecimiento local. «Veo una interacción más profunda con países como Perú y Chile. Bolivia puede beneficiarse enormemente al sumarse a estos ecosistemas, que ya han demostrado que la competencia y el crecimiento regional no son exclusivos de un solo país«, concluye.