La startup chilena busca captar cerca de US$ 2 millones y luego dar inicio a una Serie A. El plan para el capital apalancado vía crowdfunding es potenciar el crecimiento internacional y multiplicar los más de 32.000 alumnos que hoy utilizan la plataforma.

A menos de un día de abrir públicamente su ronda de financiamiento bridge a través de la plataforma de equity crowdfunding Broota, la edtech chilena de idiomas Poliglota, ya saca cuentas alegres. Ya recaudó la cifra inicial y comenzó un proceso de overfunding, en el cual ya han recibido más de US$ 500 mil, proyectado captar cerca de US$ 2 millones

La ronda de la startup, fundada por Carlos Aravena, José Sánchez y Nicolás Fuenzalida, ya cuenta con reconocidos inversionistas y founders, como Julián Ugarte (Socialab); Thomas Kimber (Karün); Daniela Lorca (Babytuto); Cristián Tala (PagoFácil); Andrés Gallardo (Desafío Latam); Nicolás Serrano (Datascope); Mario Bustamante (Instacrops); Nicole Forttes (Mujeres Empresarias) y Cristóbal Cassanello (Ecopass). También los fondos de venture capital Fen Ventures, CLIN y Wayra.

«Sentimos que abrir la propiedad de nuestra compañía a la comunidad, es dar un paso más a vincularnos con nuestros usuarios, con los profesores, y personas que generan la magia de nuestro método social, a hacerlos parte del impacto que queremos ver en todo Latinoamérica”, dice Aravena que comenta que el foco de la ronda es potenciar el crecimiento internacional, con foco en Latinoamérica, y multiplicar los cerca de 32.000 alumnos y 250 empresas que hoy utilizan la plataforma.

¿Cómo convertirse en accionista de Poliglota?

Y las personas interesadas en participar de la ronda pueden hacerlo con una inversión que parte en el $1 millón (pesos chilenos). “Es una gran oportunidad que startups con trayectoria y reconocidas quieran abrirse a recibir inversión de todo tipo de personas, muestra un gran avance en el ecosistema. Ojalá que muchas otras startups se comprometan de esa manera con su comunidad y con el entorno que las sigue, que las consume o que sencillamente las admira”, dice el CEO de Broota, Federico Iriberry.