Imagina sólo por un momento cómo sería tu vida si tuvieras la memoria perfecta del abogado Michael Ross en la serie “Suits”, o la capacidad de volver en el tiempo de Tim Lake, el personaje protagonista de la película “About time”. O quizás la facultad de predecir eventos que demuestra el rol de Tom Cruise en la película “Minority Report”, o la capacidad de unir datos y obtener conclusiones que demuestran los policías de series como “True detective”.

Otro ejemplo, la capacidad analítica- deductiva del periodista Mikael Blomkvist y la memoria fotográfica de Lisbeth Salander, personajes principales de la saga sueca “Millennium”. Si no posees estos talentos de manera innata, igualmente tengo buenas noticias para ti: Hoy en día casi todas estas habilidades pueden ponerse en práctica con el uso de herramientas de Inteligencia Artificial (IA), tanto a nivel personal como
corporativo.

El mundo tecnologizado produce cada día más y más información, es imposible que podamos gestionar toda esa data, pero la tecnología sí puede

Esto es posible gracias a que la IA existe desde 1956 y fue desarrollada por personas que visualizaron su enorme potencial para el análisis de datos, la robótica y necesidades de modelación de sistemas complejos. Este factor es especialmente útil si consideramos que el mundo tecnologizado donde interactuamos actualmente produce cada día más y más información, es imposible que podamos gestionar toda esa data, pero la tecnología sí puede hacerlo de manera más rápida y eficiente.

Por ejemplo, piensa ahora en las empresas y equipos de trabajo que manejan la información de miles de clientes y necesitan integrar toda esa data para conocer a sus consumidores, saber qué nuevos servicios implementar, y las fallas más recurrentes dentro de la gestión. Las necesidades de cada compañía son múltiples y variadas.

Al mismo tiempo, resolver estos requerimientos y atenderlos con un timing adecuado puede marcar la diferencia entre el éxito de una organización y cómo se
posiciona frente a la competencia. Gracias a las múltiples ventajas que entrega la Inteligencia Artificial, es capaz de optimizar los recursos humanos en la generación de acciones y soluciones satisfactorias frente a distintos desafíos.

La IA mejora y facilita la productividad, porque nos permite enfocarnos en lo que realmente importa y no en cosas que quitan tiempo y energía

Así que volviendo al título de esta columna, ¿Puede la Inteligencia Artificial ayudarnos a mejorar nuestras habilidades?, La respuesta es un rotundo sí. La IA mejora y facilita la productividad, porque nos permite enfocarnos en lo que realmente importa y no en cosas que quitan tiempo y energía. Y tal como los personajes de películas y series, puede ayudarnos a potenciar habilidades humanas para convertirlas en capacidades 2.0 que nos beneficiarán a nivel individual y colectivo.