Al menos US$ 73,2 millones captaron nueve emprendimientos en octubre, mes que estuvo marcado por el levantamiento de Buk, que llevó a la firma a una valuación de US$ 417 millones, la más alta obtenida por una startup tras completar una serie A. Junto a eso, los fondos de venture capital de diversos países apostaron por chilenas de diversas industrias, desde biotech hasta construtech.
Buk cierra ronda por US$ 50 millones
Buk, startup que desarrolló una plataforma SaaS para centralizar y optimizar la dimensión de recursos humanos de las empresas, anunció la captación de US$ 50 millones. La inyección de capital provino del fondo estadounidense Greenoaks, con sede en Silicon Valley, y el banco de inversión japonés Softbank, además fundadores de «unicornios» de la región, como Rappi, Kavak, Konfio y Ualá.
Con el capital la firma, fundada en 2017 por Jaime Arrieta, Santiago Lira, Teresita Morán,
Felipe Sateler y Ricardo Sateler y que permite que compañías puedan realizar tareas vinculadas las áreas administración, cultura y talento de su organización, apunta a acelerar el crecimiento en México; consolidar el mercado en Perú y Colombia; doblar los esfuerzos en el desarrollo de tecnología y productos, y concretar la adquisición de nuevas empresas a nivel regional, recientemente la startup adquirió a CTRL.
Webdox capta US$ 7,3 millones
Webdox, startup chilena que en 2012 debutó en el mercado con un software especializado en la
automatización y gestión de contratos, anunció el cierre de una ronda de inversión serie A por US$ $7,3 millones, liderada por Taram Capital, y en la que además participan fondos, como Kayyak Ventures, Alacrity México, Fondo CLIN (ChileGlobal Ventures de Fundación Chile) y Asenza Capital.
El fundador de Webdox, el abogado José Manuel Jiménez, detalla que el financiamiento irá destinado a potenciar la expansión en Brasil y Estados Unidos, países que se sumarán a los otros 12 mercados en los que ya están presentes, entre ellos, Chile, México, Colombia, Ecuador y Perú. Además de la expansión, la startup busca desarrollar nuevos features en el SaaS, el cual puede ser utilizado por distintas áreas de una empresa (legal, ventas, procurement, recursos humanos y marketing, entre otras), los clientes de ésta, y los proveedores y empleados, los pueden trabajar interconectados en la creación, negociación, aprobación, firma y post-firma de contratos y documentos.
Awto pone el pie en el acelerador tras recibir US$ 6 millones
Este es el primer financiamiento apalancado por la firma en el que se suman inversores fuera de Kaufmann Ventures, ya que también participaron Zurich AGF, Empresas Indumotora y Chile Ventures, cuenta Francisco Loehnert, cofundador y CEO de Awto, que tras fundar dos emprendimientos previos, llegó a fines de 2015 a ser parte del proyecto mediante un concurso que abrió la compañía automotriz para su company builder, instrumento que el emprendedor destaca.
En paralelo a Chile, en 2018 la startup aterrizó en Argentina, travesía extranjera a la que hoy quieren sumar otras dos paradas, esto gracias a los US$ 6 millones que levantaron. Brasil y Colombia son los países, cuenta el emprendedor que detalla que «el foco es crecer en la región, entrar a Brasil en el primero o segundo trimestre de 2022 y a Colombia a fines de ese año o principios de 2023, buscamos ir con nuestros dos modelos de negocio, pero vamos a priorizar el B2C. También queremos robustecer la plataforma tecnología y ampliar el quipo para hacer esto posible».
Agrourbana cierra ronda por US$ 4 millones
La startup chilena de agricultura vertical, cerró una ronda de financiamiento serie A por US$ 4 millones, liderada por Kayyak Ventures, y en la que también participaron los fondos CLIN administrado por Chile Global Ventures, y family offices ligados a la industria de alimentos, retail, financiera e inmobiliaria.
“Estos fondos nos permitirán construir la primera planta de agricultura vertical a gran escala en Latinoamérica y así consolidar nuestro posicionamiento”, explica el fundador y CEO de AgroUrbana Cristián Sjögren. “Se trata de producir más y mejor con menos, ofreciendo una nueva categoría de alimentos, a través de una forma sostenible de cultivar los mejores vegetales localmente, con la menor huella ambiental posible, todos los días y todo el año”.
Hey Foodie apalanca US$ 1,5 millones
La foodtech de franquicias de marcas virtuales en el país, anunció el cierre de una ronda de inversión por US$1.5 millones liderada por Invexor Venture Partners, con la que busca triplicar
su equipo de tecnología para pavimentar su crecimiento en regiones y la posterior internacionalización. La startup chilena pretende cerrar el próximo año con más de mil franquicias a lo largo del país y expandir su modelo de negocios por toda Latinoamérica. «Buscamos finalizar con 300 restaurantes en 2021 y 1000 en los próximos dos años», dice Pedro Paiva, que cofundó la startup junto a Nicolás Clement.
En detalle, la startup tienen restaurantes franquiciados o “Foodie Partners”, los que son apoyados por Big Data y algoritmos, permitiéndoles desligarse completamente de la carga administrativa de manejar estos nuevos conceptos adicionales para enfocarse únicamente en su operatividad y éxito.
Wareclouds quiere llevar la logística colaborativa más allá tras cerrar ronda por US$ 1,4 millones
El año pasado Nicolás Aramayo y Arturo Quiroz apostaron por hacer un match impensado hasta ese momento: unir las casas de las personas con pequeñas y medianas empresas (pymes) que tienen ecommerce, para que éstas últimas puedan albergar el stock de sus productos y facilitar su logística. Y, esta idea simple, pero revolucionaria acaba de recibir un espaldarazo: Wareclouds, startup bajo la cual desarrollaron su innovador modelo, acaba de levantar US$ 1,4 millones.
«Buscamos crecer harto en Chile, queremos triplicar las operaciones y consolidar la tecnología, y en enero irnos a México. Hemos tanteado el terreno azteca con startups chilenas que se han ido para ese país, hemos hablado con Cornershop. También nos ganamos el programa GoGlobal de ProChile y Corfo«, dice Quiroz.
Ipsum recibe US$ 500 mil para crecer en Estados Unidos
Ipsum, construtech fundada por Franco Giaquinto cerró una ronda por US$ 500 mil. El capital, cuenta el emprendedor, provienen de la empresa norteamericana de construcción Haskell -y se suma a US$ 1 millón que levantaron con el Corporate Venture Capital, CEMEX Ventures y el fondo chileno Manutara Ventures en 2017- e irá destinado al escalamiento de la startup, que desarrolló ProPlanner, un SaaS que permite a las empresas constructoras llevar un roadmap en tiempo real de planificación y control de obras.
«El financiamiento servirá para generar tracción en EE.UU. y construir un quipo de venta, para poder levantar una serie A a principios de 2022. Ya empezamos con conversaciones, estamos pensando entre US$ 5 millones y US$ 7 millones«, dice el emprendedor.
Terapi cierra ronda por US$ 500 mil
US$ 500 mil fue el total que levantó Terapi, startup que en 2019 desarrolló una plataforma para el sector de salud psicológico que usa inteligencia artificial para identificar qué profesional es más adecuado para los pacientes. Endurance Investment y Vulcano de Dadneo fueron los fondos que participaron en la ronda, que utilizarán para tres focos.
«Queremos seguir con la expansión, estamos abriendo Uruguay, y luego ir a Colombia o Argentina. Ya estamos en México. El segundo foco es hacer crecer el área B2B, vemos que hay una necesidad fuerte y es una opción interesante para que las empresas ayuden a sus colaboradores en términos de salud mental. Lo tercero es fomentar otras cosas, como yoga, higiene de sueño y mindfulness. Queremos hacer un producto que vaya más allá de la terapia online», dice Juan Pávez, cofundador de Terapi junto a Simón Michell.
Copperprotek logra ronda de inversión por US$2 millones
La startup de biotecnología que busca eliminar microrganismos en los alimentos a través del uso del cobre cerró una ronda de inversión serie A con aportes de la familia Berndt Cramer y del Family Office MR, lo que se suma a un levantamiento anterior de US$1,2 millones de capital semilla donde participó Tyndal Group y Endurance Investment.
“Esta tecnología puede beneficiar a toda la cadena alimenticia, desde la empresa de alimentos que puede reducir merma o reclamos por productos en mal estado, hasta el retailer que puede contar con productos en góndola por más tiempo», explica Javier Lavín, cofundador y gerente de I+D. Con este capital la biotech buscará ampliar el uso de su tecnología en otros alimentos y en otros países, ya que desde 2018 cuentan con una patente en EE.UU extendida a otros mercados. “En el corto plazo estamos trabajando en una aplicación para salchichas, producto de mucho volumen que sufre muchos problemas en su cadena de comercialización. Además, buscaremos la consagración internacional, donde estamos trabajando con las empresas líderes de alimentos de Latam y buscamos ampliar nuestra operación”, dice Raúl Molina, el otro cofounder de Copperprotek, que ya tiene los ojos puestos en México y Colombia y próximamente en Perú y Brasil.