Experto destaca que para los emprendimientos y empresas será clave acotar la franja de entrega de un producto a menos de una hora, para evitar la fuga de clientes por malas experiencias.

A medida que pasan los meses desde que inició la pandemia, la logística y el ecommerce toman un papel cada vez más preponderante en el comercio. De hecho, si en 2019 las compras online representaban un 7,4% de las ventas totales, 2020 se estima que cerraron con un 20% de representación. Sin embargo, esa demanda no libra de problemas a los negocios, que ven en la logística un duro desafío con sus clientes, especialmente en un fenómeno: las ventanas horarias de despacho.

Para Álvaro Echeverría, CEO y cofundador de la startup de logística inteligente, SimpliRoute, “los problemas en los despachos son el motivo que más reclamos genera desde las personas hacia el retail y comercios en general. Y sí, hoy mucho tiene que ver con que se incumple el día de entrega, pero habitualmente ni siquiera se entrega certeza del momento del día en que llegará un producto. Eso es un flaco favor a la experiencia del consumidor”, señala.

Las ventanas horarias tienen, sin embargo, un doble significado para quienes trabajan en rubros e industrias que muchas veces están regulados por la imposibilidad de trabajar en horario continuado. Estas bandas horarias dividen y congelan habitualmente a la flota vehicular que las empresas tienen o subcontratan. Es por esta razón que la optimización del uso se vuelve fundamental. Saber planificar y poder calcular los tiempos de envío se vuelve una necesidad frente a un panorama restrictivo como éste.

¿Cómo optimizar? “Integrando tecnología”, afirma Echeverría, agregando que “ahora hay suficientes plataformas de bajo costo, como SimpliRoute, que te permiten disponer del machine learning y la inteligencia artificial para optimizar rutas, ya sea de grandes flotas o un solo vehículo. Eso en la práctica se traduce que al usuario puedes otorgarle una certeza que pasa de hacerlo esperar todo un día, a una franja de menos de media hora. Eso también repercute en la eficiencia que puedes lograr con otra empresa, si tercerizan los despachos de sus productos”, cierra.

La trazabilidad y transparencia del despacho, serán un punto clave para evitar la ansiedad del comprador.
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¿Qué ocurre si pagué el envío más caro por su rapidez y se tardó el doble? ¿Por qué mi producto aparece durante días rumbo a mi casa? ¿Debo quedarme todo el día sin salir de casa porque el despacho no tiene un rango horario específico de llegada? Esas son preguntas que tomarán aún mayor importancia, luego de que la pandemia triplicara las ventas ecommerce en general, incluso superando las ventas físicas.

Por eso, el CEO de SimpliRoute destaca que la trazabilidad y transparencia del despacho, serán un punto clave para evitar la ansiedad del comprador. Ese soporte, por ejemplo, es uno de los diferenciales de empresas como Amazon en Estados Unidos, modelo que, a través de plataformas tecnológicas, cualquier pyme puede integrar.

“Tanto el cliente final como la empresa que vendió el producto, caen en esta categoría de espera entre las 9 am y las 9 pm. Ésto, sumado a un canal de comunicación poco ágil, puede desatar una eventual fuga de clientes, que desean tener claro cada paso que sortea su producto”, asegura Echeverría.