- La startup uruguaya automatiza llamadas a deudores mediante agentes de voz impulsados por IA, ofreciendo una solución empática, escalable y sin intervención humana. Con presencia en seis países y el respaldo de grandes tecnológicas, busca hacer la cobranza más eficiente y ética.
Cobranzas lentas, operadores que repiten el mismo guion y clientes frustrados. Así funciona buena parte del sistema de cobranza en Latinoamérica. Pero Mozart, una startup uruguaya, está decidida a cambiar ese modelo con una plataforma que automatiza las llamadas de cobranza usando inteligencia artificial.
Tecnología avanzada para llamadas sin humanos
Su tecnología utiliza agentes de voz capaces de llamar a los deudores, adaptar el tono según cada conversación, negociar y registrar compromisos de pago —todo sin intervención humana— gracias a la integración con modelos de lenguaje como Anthropic y OpenAI.
En declaraciones a distintos medios, Christian Valdomir, cofundador de Mozart, explicó: “Nuestra consigna es ser un call center sin humanos. Automatizamos tareas repetitivas, reducimos costos y mejoramos la experiencia del cliente”.
Historia de Mozart
Mozart comenzó durante la pandemia ofreciendo bots de texto para colocar créditos vía WhatsApp. A fines de 2023 integraron inteligencia artificial generativa para potenciar su negocio. Según Valdomir, “vendíamos productividad: reducción de costos y aumento de eficiencia e ingresos”.
La expansión fue rápida. Ya operan en 15 países y trabajan con importantes instituciones financieras de Latinoamérica. Pero un cliente señaló un problema clave: “Vendemos muy bien, pero el problema está en la cobranza”. Eso llevó a Mozart a enfocarse en agentes de voz que simulan conversaciones humanas, adaptándose al perfil del deudor con empatía y eficiencia.
Cobranza humana y eficiente
Valdomir destacó que el modelo actual de cobranza “opera con personas que trabajan turnos de seis horas, motivadas al principio pero que se desgastan”. Frente a esto, los agentes virtuales de Mozart cambian su enfoque según el atraso del cliente, modificando tonos, persuasión y negociación. “No es lo mismo llamar a alguien con 30 días de atraso que a uno con 300”, señaló.
Además, la plataforma permite que varios agentes trabajen al mismo tiempo: uno analiza la probabilidad de pago, otro conversa, otro agenda compromisos y otro hace el seguimiento posterior. Todo queda registrado y se ajustan estrategias en tiempo real.
Mozart funciona con un equipo compacto y cuenta con el respaldo de programas como Microsoft for Startups y NVIDIA Inception, lo que les ha dado acceso a tecnología avanzada para mejorar la fluidez y naturalidad de sus agentes de voz.
Presencia en Latinoamérica y visión a futuro
Actualmente operan en seis países, con un foco especial en México, donde ya trabajan para uno de los bancos más grandes. Sobre el futuro, Valdomir concluyó: “Queremos hacer una cobranza más ética, más empática, eficiente para nuestros clientes, pero también para el bolsillo de la persona a la que estamos llamando”.
Mozart está transformando la cobranza en Latinoamérica, combinando tecnología de punta con un enfoque humano que podría cambiar para siempre la relación entre empresas y clientes.