También planean expandir su equipo a 300 miembros y fortalecer sus productos financieros, incluyendo préstamos y avances de nómina.

En agosto de 2020, en medio de la pandemia que cambió la forma en que trabajamos y vivimos, nació Ontop, startup colombiana que aborda una necesidad crítica en el mercado laboral global: con la creciente tendencia del trabajo remoto, las empresas se encontraron con el desafío de contratar y pagar a empleados que trabajaban desde sus países de origen, de esta forma, la startup surgió como una solución a este problema.

Junto con desarrollar la plataforma de nómina global, la startup que es parte del portfolio de Y Combinator, tiene una funcionalidad para resolver la dificultad de los colaboradores de recibir y gestionar sus ingresos en moneda extranjera. Muchos empleados se preguntaban cómo recibir y aprovechar los dólares que ganaban.

Actualmente, el emprendimiento se ha consolidado en el mercado y procesa US$ 300 millones al año en nóminas globales en 108 países del mundo, además sus founders Jaime Abella, Julian Torres y Santiago Aparicio cuentan que están muy cerca de alcanzar la rentabilidad. En ese contexto, este año cerraron una ronda por US$ 10 millones, lo que se suma a US$ 20 millones captados en 2021 en una ronda Serie A, liderada por Tiger Global y Point 27 Ventures, con la participación del fondo SB Opportunity de Softbank.

Para el 2024, tienen planes ambiciosos de triplicar sus cifras de crecimiento, facturación y cantidad de dólares procesados para así alcanzar los US$ 1 mil millones en nóminas internacionales transadas. También planean expandir su equipo a 300 miembros y fortalecer sus productos financieros, incluyendo préstamos y avances de nómina.

Fracasar y volver

Previo a fundar Ontop, Torres y Aparicio emprendieton con Fitpal, una compañía que experimentó con pagos internacionales a gimnasios. Esta experiencia les dio una visión única de los desafíos que enfrentan las empresas al contratar talento global y gestionar pagos internacionales.

Para arrancar con la nueva apuesta decidieron construir una base de inversionistas ángeles: “En una semana, o sea nosotros lanzamos un top y en esa siguiente semana logramos levantar US$ 300 mil de los 25 fundadores más reconocidos de Latinoamérica y de Colombia. Entonces ahí estaban los de Rappi, estaban los de Platzi, Avi, Adi, Mobi”, cuenta Julián.

También decidieron aplicar a la aceleradora Y Combinator, un paso que habían intentado en cinco ocasiones anteriores sin éxito. Sin embargo, en su sexto intento, lograron pasar la selección y accedieron a una red invaluable de contactos y fondos de inversión en los Estados Unidos. Este logro los llevó a mudarse a Miami, con la visión de expandir su empresa globalmente.