A la fecha la app ha levantado su ronda Pre-seed en un rango de US$ 75.000 a US$ 150.000 y espera comenzar su serie de inversión seed en julio de este año.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, en América Latina se desperdician 127 millones de toneladas de alimentos. Buscando generar un impacto en esta problemática, nació Planet Oliver, startup que de manera superficial parece ser una plataforma de delivery tradicional en la que, de acuerdo a la ubicación del usuario, es posible puede acceder a diferentes opciones de comida, sin embargo, Oliver tiene algo especial: es un espacio en el que los restaurantes suben los platos excedentes que les han quedado en su jornada con descuentos que van desde el 30% hasta el 75%.
“Somos una startup que lucha contra el desperdicio de alimentos. Lo hacemos por medio de una app en la que vendemos, a precios de descuento, todos los productos en perfecto estado que panaderías, restaurantes, reposterías, fruvers y supermercados no alcanzaron a vender”, así define el propósito de la compañía el cofundador y CEO de Planet Oliver, Manuel Oliva, que fundó la startup junto a Gonzalo Montenegro, COO y Álvaro Panduro, CCO.
Todo comenzó a inicios de 2020 en medio de un MBA en Madrid, España, a partir de un proyecto de tesis que apuntaba a buscar formas de impactar positivamente al medio ambiente. Durante su investigación, hallaron una oportunidad en los alimentos que son desechados en los establecimientos de venta de comida que representa un 20% del total de desperdicios de comida en el país.
Así, los emprendedores trajeron su idea a Colombia y desarrollaron la app, que a la fecha, y con 11 meses de operación, ha logrado “salvar” más de 9.000 productos y ya cuenta con más de 150 aliados en Bogotá y Barranquilla y más de 12.000 personas que han descargado la aplicación.
Actualmente, la startup ha levantado su ronda Pre-seed en un rango de US$ 75.000 a US$ 150.000 y espera comenzar su serie de inversión seed en julio de este año. Los recursos adquiridos serán usados para robustecer todas las áreas de la compañía con el objetivo de seguir creciendo.
Buscando el triple impacto
Tras la solución, dice Oliva esta el objetivo de “generar un triple impacto: primero, brindarle beneficios a los restaurantes porque pueden vender sus productos; segundo, ayudar al consumidor final pues puede encontrar una oferta de comida económica; y tercero, al ecosistema, debido a que la aplicación busca tener un impacto positivo con el medio ambiente al reducir el desperdicio. Queríamos crear algo que fuera mucho más allá de ganar dinero, nosotros nos enfocamos en esa es la teoría del valor compartido, en la que además de obtener rentabilidad queremos dejarle un impacto positivo a la sociedad, que es algo que está dentro del ADN de nuestra compañía”.
En esa línea, el emprendedor plantea que las startups pueden impactar en lograr empresas más sostenibles y prácticas de consumo más positivas para nuestros ecosistemas: “La pandemia nos generó un despertar consciencia sobre lo que puede venir a futuro y por eso las personas están buscando marcas, empresas y productos que estén alineadas con esas políticas e ideas que son amigables con el medio ambiente y que contribuyen de manera social al planeta. El mercado tiene una tendencia hacia arriba de preocuparse por el medio ambiente” puntualiza.