- Fooch, fundada por Juan Francisco Jullian y Frank Roig, actualmente opera en cuatro comunas de Santiago: Las Condes, Vitacura, Providencia y La Reina.
- Para 2025, la compañía proyecta expandirse a nuevas comunas en Chile y ampliar su oferta de productos.
Se estrena oficialmente Fooch, aplicación desarrollada 100% en Chile, con el objetivo de conectar a los usuarios con platos caseros preparados por entusiastas de la cocina. En un movimiento que promete revolucionar la industria del delivery, esta innovadora startup no solo ofrece precios más bajos y entregas más rápidas, sino que también elimina el desperdicio de alimentos y genera un impacto social positivo.
Fundada por Juan Francisco Jullian y Frank Roig, la startup que fue inicialmente concebida en pandemia, ya cuenta con 800 socios cocineros y 1.800 usuarios, quienes tienen acceso a más de 445 platos diferentes. Estos platillos van desde gnocchi bolognesa y pastel de papas, hasta curry de garbanzos y pizza margarita. Desde Fooch, explican que los usuarios pueden elegir sus platos favoritos, que luego son recogidos por repartidores directamente en las casas de los cocineros y entregados rápidamente a sus destinatarios.
«Me di cuenta de que podíamos crear algo juntos, un ecosistema de comida donde esos chefs independientes pudieran revivir sus sueños y compartir su arte: así nació nuestra plataforma. Un espacio donde los chefs locales pueden ofrecer sus platos en su comunidad, conectados a través de repartidores que también encontraron una nueva oportunidad en este sistema«, afirmó Jullian.
Fooch: Sostenibilidad y oportunidades para chefs locales
Entre los principales diferenciadores de Fooch está su estricto control del inventario de platos disponibles. Esto permite eliminar problemas de sobreventa y retrasos en la entrega. Además, los cocineros, considerados «socios», no pagan comisiones de venta, lo que garantiza que el precio del plato sea 100% ganancia para ellos.
La misión de la foodtech es clara: reducir el desperdicio de alimentos y alimentar tanto cuerpos como almas. «Creamos un sistema donde cada plato que se prepara encuentra un hogar. Donde cada sobra se transforma en una oportunidad para alguien más, en un ciclo de sostenibilidad alimentaria, impulsado por la pasión y la necesidad», señala el emprendedor.
Las proyecciones para el futuro
Actualmente, Fooch opera en cuatro comunas de Santiago (Las Condes, Vitacura, Providencia y La Reina) y tiene planes de expandirse al resto de Chile. Y eventualmente, al mundo. Su modelo no solo beneficia a los amantes de la comida, quienes descubren platos nuevos y económicos, sino también a los socios cocineros. De hecho, estos últimos pueden generar ingresos desde la comodidad de su hogar.
De cara al 2025, la startup planea ampliar su cobertura a nuevas comunas dentro del territorio chileno y aumentar su oferta de productos. Asimismo, busca consolidarse como una alternativa sostenible y comunitaria en el mercado del delivery.